El pasado día 3 de septiembre, agentes de la Policía Local se hicieron cargo de una menor la cual quedó ingresada en el Centro de Menores "Mediterraneo" ante la imposibilidad de localizar a sus padres.
A la mañana siguiente, se persona en las dependencias policiales la madre de la menor la cual manifiesta que el día anterior cuando se encontraba realizando compras tuvo una discusión con la menor y ésta se marchó.
Los agentes ponen en conocimiento de la mujer que tiene la obligación de hacerse cargo de su hija, a lo que se niega por continuos problemas de comportamiento. La madre de la menor manifiesta a los agentes la intención de dejar a su hija ingresada en el Centro de Menores ya que ella y el resto de sus hijos sufren a diario amenazas por parte de la joven.
Tras ser informada de que podía incurrir en un licito penal y a pesar de las advertencias de los agentes, la madre no desiste en su actitud y se niega a regresar a su domicilio junto a su hija.
Los agentes al ver la reacción de la mujer se ven obligados a trasladarla a las dependencias de la Policía Nacional, concretamente al SAF, donde se instruyeron diligencias.