Este año a un grupo de jóvenes les ha parecido que lo más divertido en la noche de Halloween sería tirar huevos a otros niños que se divertían por las zonas del centro.
Quien estuviera paseando ayer por la Marina, por ejemplo, pudo observar cómo el suelo estaba lleno de huevos explotados, así como por Constitución o la zona alta del Revellín.
Fueron muchos los ciudadanos que se quejaron de esta ocurrencia del algunos graciosos que pensaron que sería la mejor forma de pasar este terrorífica noche. Algunos de estos jóvenes, incluso, se llevaron la reprimenda de adultos que paseaban tranquilamente.