En la operación fue detenido también un agente de las Fuerzas Auxiliares de Marruecos

Piden cuatro años de cárcel para un marroquí para introducir 12 kilos de droga a través de la valla fronteriza

La Fiscalía solicita un total de cuatro años de cárcel para un ciudadano de nacionalidad marroquí por haber introducido una mochila con 12 kilogramos de droga el pasado 24 de junio a través de la valla fronteriza, en las inmediaciones de la Finca Berrocal.

perimetro valla frontera
photo_camera Imagen de la valla del perímetro fronterizo (C.A.)

En la misma zona fueron encontradas otras dos mochilas con droga, cuyo peso no fue precisado. Además, se le pide una multa 274.471 euros. El índice de pureza de la droga, el denominado THC, oscilaba entre el 24 y 3l 34%. La droga arrojó un peso 11.907 gramos.

El individuo fue detenido después de una arriesgada actuación por agentes de la Guardia Civil de patrulla en frontera y otros que fueron comisionados por el centro de mando en apoyo. En relación a la intervención policial contra el tráfico de drogas, agentes marroquíes detuvieron en territorio del vecino país a un miembro de las Fuerzas Auxiliares desplegados en la zona fronteriza, que, supuestamente, habría facilitado la entrada en territorio español del juzgado este lunes, concretamente a través de la puerta 14 del perímetro fronterizo.

Declararon en el Juzgado de lo Penal número 2 hasta tres agentes de la Guardia Civil y sus testimonios fueron muy esclarecedores en torno a los hechos. Así y sobre las ocho de la mañana de ese día, uno de los agentes que patrullan en vehículos por la zona fronteriza, observaba a un individuo que portaba una mochila. Se encontraba en una zona restringida, en la que no hay paso de peatones. El testimonio fue crucial, dado que el visionado de la grabación realizada mediante cámaras térmicas presentaba deficiencias, de manera que había más de una hora de grabación que era imposible de visionar.

El agente, que tras apearse del vehículo oficial se acercó al individuo, lo encontró a una distancia de unos tres metros, aproximadamente. En ese momento, la persona se deshizo de la mochila, y huyó ascendiendo por una zona escarpada en dirección de las casas de la Finca Berrocal.

La vigilancia de los guardias era constante en la zona y finalmente fue detenido en torno a la una de la tarde por otros patrulleros de la Guardia Civil, uno de los resultó herido. El individuo estaba “agazapado”, escondido en unos matorrales, y trató de darse a la fuga al verse detectado por los agentes. El lugar donde se produjo la detención estaba a pocos metros donde fue encontrado el alijo de hachís.

Tras ser detenido, el guardia civil que lo vio a las ocho de la mañana a muy corta distancia lo reconoció sin duda cuando se lo presentaron sus compañeros, los que habían practicado la detención. Este lunes, en la sala de vistas, también lo reconoció con total certidumbre.

La versión que ofreció el acusado, para quien su defensa pide la libre absolución con todos los pronunciamientos favorables es, cuando menos, llamativa.

Asegura que había entrado por la frontera en torno a las seis de la mañana para efectuar el porteo. Dijo que esta actividad empieza a las ocho de la mañana y termina, según los días, entre las diez y las once de la mañana. Señaló que no había vuelto a Marruecos porque le habrían impedido entrar las autoridades marroquíes y que decidió quedarse a dormir en la zona donde fue detenido.

Los agentes que declararon en sede judicial dijeron que es “imposible” dormir en esa zona, dado el alto desnivel y la existencia de plantas espinosas, como con las que ocasionaron heridas a uno de los guardias civiles durante la detención.