delito de encubrimiento

La Policía detiene a otros dos menores por esconder el arma con el que se cometió el homicidio en La Ribera

A los jóvenes, residentes en "La Esperanza", se les acusa de un delito de encubrimiento. Ya son cinco los menores que se encuentran en "Punta Blanca" implicados de manera directa e indirecta con la muerte de un joven tetuaní de 20 años el pasado viernes. 

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photo_camera El joven de 20 años falleció de tres puñaladas/ C.A.

La Policía ha detenido este miércoles a dos menores residentes en "La Esperanza" por hacer desaparecer el arma con el que se cometió el homicidio el pasado viernes en La Ribera y que acabó con la vida de un joven tetuaní de 20 años.

Estos jóvenes han sido puestos a disposición judicial y han pasado a ingresar en el centro de "Punta Blanca" por un presunto delito de encubrimiento, tras confesar los casos imputados. 

Ya son cinco los menores que se encuentran en "Punta Blanca" relacionados con la muerte del joven en la playa. Tres de los cuatro menores que el sábado pasaron a disposición de la Fiscalía como presuntos responsables de la muerte a puñaladas de la víctima, están imputados por robo con violencia e intimidación y homicidio. 

Los hechos se produjeron en torno a las cuatro y media de la tarde del pasado viernes en la playa de La Ribera. La víctima, que se encontraba acompañada de un amigo, fue asaltada por los agresores con el propósito de robarles. El fallecido intentó defenderse e, incluso, acertó a lanzar una piedra contra sus atacantes. Como respuesta, uno de los menores le asestó una puñalada en el costado izquierdo.

Mortalmente herido, la víctima consiguió ascender por las escaleras que conducen desde la playa hasta las proximidades del Club Caballa, en la calle Independencia, donde cayó desplomado. Los intentos de los sanitarios del 061 por reanimar al joven resultaron estériles.

De inmediato, la Policía Nacional organizó un dispositivo de búsqueda de los autores. Minutos más tarde, los agentes capturaban a un grupo de menores que huían a través de las escolleras de El Sarchal. Los fugados fueron interceptados con el apoyo de una patrullera de la Guardia Civil, a bordo de la cual se condujo a los menores a una zona más accesible.