La quema de un contenedor ya no es noticia, porque lo que es habitual deja de serlo, pero lo que no puede pasar desapercibido es el gasto que supone para las arcas públicas y no solo en materiales a reponer. La movilización de estos dispositivos de seguridad y emergencias no sale gratis.
Sobre las 10:45, los vecinos de la barriada del Mixto han alertado al 112 de un contenedor ardiendo junto al CEIP 'Valle Inclán', lo que ha provocado la movilización de dos camiones del SEIS, dos vehículos de la Policía Nacional y otros tantos de la Local, dada, sobre todo, la cercanía del centro de Primaria.
Por suerte, la intervención de los vecinos ha evitado que la situación pasara a mayores y no se han visto afectados el resto de contenedores de residuos, ni los coches aparcados en sus inmediaciones.
Un testigo presencial ha declarado a la policía que ha presenciado como un grupo de unos seis o siete jóvenes, con mochilas, han prendido fuego al contenedor, dándose a la huida inmediatamente.
Con independencia del susto que provocado en los vecinos de la zona y una ligera retención de tráfico, poco más habría que relatar. El contenedor no ha sufrido daños excesivos y ya se encuentra en su lugar. Pero esta forma vandálica de ocio sale muy cara y, por desgracia, no se suele llevar a los culpables ante la justicia (porque no se les puede identificar y detener) y nadie se hace cargo de las costas que acarrean estos sucesos que salen del erario público, es decir, el bolsillo de todos los ciudadanos.
