“Esa invasión de la Jefatura Superior de Policía de Ceuta nos recuerda mucho a la que se produjo el 23 de febrero en el Congreso de los Diputados”. Éste el modo con el que el sindicato Unión Federal de Policía (UFP) ha ilustrado la conducta “violenta” con la que se condujeron los mandos de la Guardia Civil durante la visita la pasada semana de la jefa de Operaciones Marítimas de Frontex, Brice Caldairau.
El sindicato asegura que la actitud que reprocha a la Guardia Civil se inició cuando un teniente coronel del cuerpo recriminó a la responsable de Frontex en Ceuta haberse saltado el protocolo cuando recogía en el puerto a la delegación policial de visita en la ciudad. “No contento con esta actitud, se personaron en la puerta de la Jefatura Superior varios vehículos de la Guardia Civil sin que estuvieran convocados para ninguna reunión”, narra la UFP en un comunicado. Según el relato del sindicato, el mismo teniente coronel de la Guardia Civil pretendió que en la comparecencia de prensa, celebrada en el despacho del comisario de Policía, Alfonso Sánchez, se desplazara a la jefa del dispositivo Frontex en Ceuta.
El sindicato asegura que, tras el incidente, el mando de la Benemérita trató de llevar a la fuerza a la delegación de Frontex a la frontera de El Tarajal, pretensión ante la cual los responsables de la Policía Nacional le recordaron que la visita había de seguir el protocolo establecido.
UFP identifica al mando de la Guardia Civil implicado en el incidente como “el responsable de la carga contra varios inmigrantes que pretendían pasar a nado la frontera y que se saldó con 13 fallecidos”.
El sindicato concluye su comunicado expresando su apoyo a los responsables de la Jefatura, a la Comisaría General de Extranjería y, en particular, a la inspectora jefe responsable última de la coordinación de la Operación Minerva de Frontex.
