La señora Xu, llevaba dos años con molestias en los ojos. Se le enrojecían, le picaban… Se había estado tratando con unas gotas por su cuenta y riesgo y sin receta. Las molestias eran parte de su día a día y se había acostumbrado, según reconoció posteriormente a los doctores.
Pero un día empeoró y cuando ya no aguantaba más acudió a un hospital. Allí, al examinarla, los médicos se encontraron con algo insólito. En sus pestañas habitaba una colonia compuesta por más de 100 parásitos. Al parecer, en los adultos tener ácaros en esa zona del ojo es normal, pero lo de la señora Xu era algo nunca visto.
A la sorpresa fue al descubrir la causa. Cuando los médicos le interrogaron sobre los hábitos de limpieza de su casa, la paciente reconoció que no había lavado la funda de la almohada desde 2012.
