Fueron detenidos en febrero de 2016 como presuntos integrantes de una célula yihadista

La Audiencia Nacional comienza a juzgar este lunes a Hamido y otros dos ceutíes acusados de terrorismo

Hamed Abderrahaman Ahmed fue detenido en 2016 junto a otros dos ceutíes en una operación coordinada por la Comisaría General de Información de la Policía Nacional y la DGST de Marruecos. 

juicio
photo_camera Pruebas recogidas por el CNP (CEDIDA)

Ahmed Hamed Abderrahaman “Hamido”, el conocido como el “talibán español”, será juzgado desde mañana lunes en la Audiencia Nacional, junto a los también ceutíes Morad D.M. y Hamsa L.A. Los tres están acusados de integración en organización terrorista como miembros de una célula yihadista. La Fiscalía solicita doce años de cárcel. Los tres procesados fueron detenidos en El Príncipe y Cortijo Moreno el 23 de febrero de 2016.

Hamed Abderrahaman Ahmed era, según reveló la Policía, uno de los dos cabecillas de la célula yihadista desarticulada en febrero de 2016. La investigación, dirigida por la Comisaría General de Información de la Policía Nacional y la DGST de Marruecos, se saldó con la detención de los tres presuntos yihadistas españoles en Ceuta y de un cuarto marroquí en la localidad de Nador.

Según desveló el Ministerio del Interior, los miembros de la célula detenidos habían desplegado una intensa actividad de captación con el propósito de incrementar las filas de activistas y combatientes de la organización terrorista DAESH en el frente de guerra sirio-iraquí. El grupo se caracterizaba por su perfecta organización y jerarquización, plasmada en la asignación de tareas muy definidas a cada uno de sus miembros. Abderrahaman Ahmed compartía las funciones de dirección de la célula con otro ceutí, mientras un tercero tenía encomendadas labores de apoyo.

Los investigadores reconocieron en los integrantes de la célula una “decidida voluntad” de cometer acciones terroristas en territorio español. Los ceutíes integrados en el grupo y su colaborador marroquí habían emprendido gestiones en su entorno para la adquisición de armas y sustancias susceptibles de ser empleadas para la fabricación de explosivos.

La cualificación militar y de combate que Interior atribuye a Abderrahaman Ahmed, quien fue apresado por tropas estadounidenses en Afganistán en 2002, hizo que los investigadores trataran desde el principio a la célula como un grupo especialmente peligroso.

La Policía subrayó el carácter “carismático” y de “referente doctrinal” de uno de los detenidos, que responde al nombre de Hamza Layachi Abdeslam y a quien se considera comprometido con DAESH hasta el punto de mostrar su disposición a inmolarse en su nombre. Uno de sus hermanos, taxista en la ciudad, falleció en 2013 tras perpetrar un atentado suicida contra un cuartel del ejército sirio al volante de un camión bomba.