En la operación se ha detenido a jóvenes familiares de históricos narcos que lideraron organizaciones delictivas ya desmanteladas por la Policía y que les han relevado debido a su paso por prisión o al encontrarse cumpliendo condena, según ha relatado la Policía, que ha añadido que se trata de un relevo generacional al mando del negocio ilegal de la heroína.
La heroína sustraída era traída directamente de Turquía y aún conservaba el papel de periódico turco como envoltorio. Además, al igual que los tres kilos de cocaína, se trata de sustancias de gran pureza.
A esta intervención hay que sumar más de 30 kilos de sustancia de corte para la adulteración y preparación de paquetes de entrega --una vez la heroína procedía a su manipulación y corte, la cantidad incautada triplicaría su peso hasta 30 kilos preparados para su venta--, una prensa hidráulica, paquetes, balanzas y diversos efectos de preparación y pesaje.