La gestión de los centros de mayores se ha convertido en un lucrativo negocio en España

Ceuta no alcanza ni la mitad de la tasa de plazas residenciales para ancianos recomendada por la OMS

¿Cumplen los poderes públicos en España con su encomienda de poner a disposición de la sociedad la infraestructura necesaria para cuidar de nuestros mayores?

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photo_camera Una trabajadora acompaña a una residente en un centro de mayores

La pandemia de coronavirus ha servido para someter a escrutinio las residencias de mayores, instituciones donde la incidencia de la enfermedad ha alcanzado tintes trágicos. El covid-19 ha sacado a la luz las deficiencias de un servicio público que ha de considerarse esencial y que, sin embargo, resulta maltratado por las administraciones en no pocos de los territorios españoles.

Más allá de algunos modelos de gestión cuando menos controvertidos, la crisis ha invitado a reflexionar acerca de si los poderes públicos cumplen con su encomienda de poner a disposición de la sociedad la infraestructura necesaria para cuidar de nuestros mayores. ¿Cumple España con los estándares internacionales que establecen los recursos mínimos exigidos para atender a los ancianos?

La media española en número de plazas residenciales se encuentra muy por debajo de la que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). Ceuta se queda lejos de la media española.

Si la OMS plantea como recomendable disponer al menos de cinco plazas residenciales por cada cien ciudadanos con 65 años o más, España se queda en apenas el 4,1. Y Ceuta, en el 2,2. Los datos proceden de un estudio elaborado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) con datos a fecha de abril del pasado año.

 

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Ceuta dispone de dos residencias de ancianos de gestión privada y una pública que suman 218 plazas. Esto es, por cada cien personas con 65 o más años, la ciudad dispone de 2,2 plazas. El dato queda muy alejado, por ejemplo, del que caracteriza la situación de las provincias españolas en las que la capacidad residencial es mayor: Soria, 11; Palencia, 10; o Guadalajara, 9,7.

En cuanto a número de plazas, Ceuta está más próxima a provincias como Alicante o Murcia, que replican el 2,2 que también registra Ceuta. La vecina Cádiz dispone de 2,6 plazas por cada cien gaditanos mayores de 65 años.

En cuanto a la distribución de las plazas, en Ceuta el 74,3% corresponde a las plazas disponibles en los centros privados (Cruz Blanca y Gerón). La residencia pública Virgen de África cubre el resto de la oferta.

La gestión de residencias de ancianos se ha convertido en España en un lucrativo negocio. El sector movió el año pasado en el país cerca de 5.000 millones de euros, según revela la consultora DBK.