El Gobierno municipal se ha colocado sin tapujos del lado de los empresarios afectados por la política de algunos bancos radicados en la ciudad que se ha traducido en el bloqueo de numerosas cuentas bancarias y en la aplicación de restricciones a los ingresos bancarios formalizados con billetes de valor superior a los 100 euros.
El portavoz del Gobierno, Jacob Hachuel, ha subrayado esta mañana ante los periodistas la desproporción que a su juicio existe entre las medidas adoptadas por los bancos y la vigilancia sobre actividades relacionadas con el blanqueo de capitales a la que la ley obliga. “Es como matar moscas a cañonazos: hay mecanismos para combatir el blanqueo sin llegar a esta situación”, ha defendido Hachuel.
La cara visible del Gobierno local no ha hurtado calificativos para definir la actitud de las entidades financieras. Hachuel ha llegado a presentar la situación por la que atraviesan los empresarios de “aberración” e “injusticia”.
Tras expresar su solidaridad con los empresarios afectados, Hachuel ha explicado que el Gobierno de la Ciudad ha impulsado gestiones ante el Banco de España y el Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (SEPBLAC) para aclarar las razones que han movido a los blancos a establecer nuevas restricciones en sus relaciones con los empresarios ceutíes.
