¿Las condiciones que permitieron la victoria del PSOE en abril se repetirían en el caso de una nueva convocatoria electoral?

Dudas en el escenario político local ante unas futuras nuevas generales

Los resultados de las municipales de mayo y el posterior acercamiento del PSOE local al PP de Juan Vivas modifican la escena política local ante una convocatoria de nuevas elecciones generales.

El diputado José Simón(dcha.) junto a los senadores Hamed Mohamed y Blanca Gómez (C.A.)
photo_camera El diputado José Simón(dcha.) junto a los senadores Hamed Mohamed y Blanca Gómez (C.A.)

Las horas que median hasta que el rey Felipe VI se entreviste con Pedro Sánchez y Pablo Iglesias en el marco de la ronda de contactos previa a la investidura del presidente del Gobierno resultan decisivas para conocer si los españoles deberán volver o no a las urnas el próximo noviembre.

En Ceuta, el panorama de unas nuevas elecciones abre muchas dudas acerca del resultado final. El 28 de abril, y por primera vez en XXXX años, el PSOE conseguía ganar unas elecciones generales en la ciudad. Los candidatos socialistas al Congreso, José Simón, y al Senado, Hamed Mohamed Ahmed y Blanca Gómez, se imponían con claridad a las formaciones de derecha. Un éxito que de repetirse las elecciones será más difícil de alcanzar que en abril.

El diputado Simón logró reunir el 36,34% de los votos, a 4.600 de Vox y a 5.600 del PP.

Sin embargo, las circunstancias políticas han cambiado en el transcurso de los últimos cinco meses. Uno de los factores que facilitó la victoria de los socialistas fue la disposición de los partidos progresistas locales, que no concurrieron a los comicios, a que sus votantes prestaran su apoyo al PSOE. Aunque no hubo en ningún caso un llamamiento explícito al voto a los socialistas, el PSOE acabó logrando más de 13.000 sufragios, buena parte de ellos “prestados”.

La sintonía entre PSOE, MDyC y Caballas ha quedado desactivada tras las elecciones municipales de mayo. La caída electoral de las formaciones localistas en los comicios municipales de mayo y la percepción de que los socialistas se han ofrecido a apuntalar el Gobierno en minoría del popular Juan Vivas ponen en cuestión que el caladero de votos de MDyC y Caballas pueda volver a estar a disposición del PSOE.

La victoria socialista también estuvo propiciada por un fenómeno inédito en Ceuta: la aparición de un sólido adversario que amenazaba la hegemonía del PP. El electorado de derechas se fracturó en dos, un escenario que dejó el camino expedito al PSOE.

En unas futuras elecciones, sin embargo, el votante de derechas tendrá una referencia en los resultados del 28-A de la que carecía entonces y cuya ausencia favoreció a los socialistas.