El Gobierno de Pedro Sánchez ha defendido hoy ante la Gran Sala del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) su recurso a la sentencia que condenaba a España por la devolución irregular de dos migrantes en la frontera de Melilla con Marruecos.
La vista se ha convertido en una defensa de la política migratoria del Gobierno. Su representante ante el Tribunal ha hecho una distinción entre la “inmigración económica” y los movimientos humanos obligados por conflictos bélicos. A juicio del ponente, en el primer caso no es aplicable el principio de no devolución.
En su exposición, el representante español aludió a la violencia con la que aseguró se han conducido en tiempos recientes los migrantes que saltan la valla fronteriza.
Con su sentencia, el TEDH puso en cuestión en su día la práctica de las expulsiones sumarias de migrantes que consiguen alcanzar territorio español en Ceuta y Melilla. El Tribunal estimó que la devolución a Marruecos de la maliense N.D. y el costamarfileño N.T. vulneró el Convenio Europeo de los Derechos Humanos. Los dos migrantes africanos denunciaron que el 13 de agosto de 2014 fueron devueltos desde Melilla al país vecino después de alcanzar suelo español y tras permanecer encaramados en la valla durante horas.
Los jóvenes descendieron del cercado por la escalera que les proporcionaron los agentes de la Guardia Civil quienes, inmediatamente, los entregaron a las fuerzas de seguridad marroquíes.