Opinión

El miedo de la derecha

Desde el primer minuto y tras conocerse la sentencia Gürtel dije que Rajoy no podía seguir ni un minuto más en el Gobierno. La corrupción no puede tener cabida en un estado democrático.

Siempre he tenido mi visión interna de Pedro Sánchez y mis diferencias de peso con él, que no han cambiado porque él haya sido elegido Presidente del Gobierno, igual que no cambiaron cuando salió como secretario general. Pero esas diferencias justificadas y de peso no me impiden saber diferenciar entre visión interna y apoyo real. Primero el país, luego las siglas, por último una misma. Y al no invertir este orden yo sí quiero hacerle llegar que tiene todo mi apoyo y mi lealtad, una lealtad que no se basa en no contradecir, sino una lealtad que se basa en construir. 

Dicho esto, matizo que, una vez más y al igual que hace un año, cuando una gran parte nos insultaron por haber tomado una decisión imprescindible en un momento convulso del País, estoy enormemente orgullosa del PSOE.

Desde el primer minuto y tras conocerse la sentencia Gürtel dije que Rajoy no podía seguir ni un minuto más en el Gobierno. La corrupción no puede tener cabida en un Estado democrático. Y antes de seguir quiero hacer una pequeña matización a quienes con la mentira pretender confundir una evidencia. El Partido Popular no ha asumido ninguna responsabilidad ante los casos de corrupción, en el PSOE decisiones y dimisiones. Actualmente no hay nadie que esté vinculado en los EREs en la política andaluza. Además, fue la Junta de Andalucía la que tomó la decisión de ir al juzgado y denunciar el uso ilegal e imperdonable de un conjunto de subvenciones de una administración. El caso Bárcenas se trata de 20 años de financiación irregular con cientos de imputados, alcaldes, concejales, presidentes autonómicos y consejeros autonómicos. Es un ejercicio de corrupción generalizada y comprobada en el seno de un partido que hasta ahora gobernaba España. 

Por tanto, lo lógico hubiera sido la dimisión de Rajoy, pero él ha evitado esa responsabilidad compartida que ha hecho que hayamos tenido que tener la moral de presentar la moción de censura. Es aquí cuando podemos debatir el tiempo que Pedro tiene que estar en la Moncloa, pero no la acción de estar. Si me preguntan a mí tengo una visión clara, elecciones lo antes posible. El tiempo justo para quitar lo vetado por Rajoy, recuperar la agenda social y demostrar que sí se puede Gobernar de otra manera a la realizada por el Partido Popular. La juventud, las mujeres, las personas mayores, la migración, la educación, la sanidad, la cohesión estructural y los trabajadores se merecen otras respuestas más allá de la indiferencia y el desprecio que han padecido todos estos años.

Y no, una moción no es un golpe de estado. Me resulta curioso tener que volver a salir, antes desde el punto de vista orgánico, ahora desde el institucional, para explicar que lo único que se ha aplicado es una medida democrática y pactada. Unas reglas del juego que hemos hecho entre todos, un instrumento político para posibilitar el equilibrio en el poder. 

Así que, el PSOE ha estado en la altura de un partido que sabe hacer oposición y, sobre todo, que sabe Gobernar .

Y en este contexto, donde sí me he visto salpicada por mi posición clara en un comité  que sirvió para evitar precisamente esta situación, hay quienes me preguntan que cómo defiendo ahora estas alianzas. Y mi respuesta es muy concisa, me hubiera gustado más el apoyo positivo de Ciudadanos el cual ha preferido alinearse con la corrupción, pero me parece mezquino que sigan sembrando el mismo miedo de siempre, el miedo de la derecha cavernícola, el miedo a la izquierda que siempre vuelve para arruinar y destruir España. 

El PSOE no ha pactado nada con los independentistas, el PSOE no ha negociado nada con Bildu, el PSOE no va a hundir a España. 

El PSOE es el partido que acabó con ETA, el partido que evitó unas terceras elecciones votando con responsabilidad, el partido del 155 y el partido que jamás va a negar el diálogo para apostar por la unión territorial dentro del marco de la Constitución. 

El PSOE es el partido que más derechos nos ha traído, el que supo renunciar a tiempo cuando llegó la crisis y adelantar elecciones. El que ha sabido fiscalizar, el que no mantiene a nadie imputado y el que siempre ha dejado la huella de la convivencia, la igualdad y la libertad. 

¿Ana Pastor no fue presidenta de la Cámara por los votos de los independentistas? ¿Si los independentistas o el PNV hubieran votado que no a la moción, era debido a que Rajoy les ofreció algo? 

Dejemos la manipulación a un lado y digamos alto y claro que lo único que daña la inestabilidad de España es mantener a un Gobierno condenado por corrupción. 

¿No tenemos la dignidad suficiente de reconocer eso?  La ética de la democracia está en sus niveles más bajos.

Ahora sólo espero entendimiento, ninguna concesión y no alargarnos mucho en esta partida claramente en minoría. Gobernar será difícil. Volvamos a empezar.