Opinión

A dos grandes defensores del medio ambiente ceutí

Esperemos que esta vez el cambio sea de mejora para dicho departamento y empecemos a ver la realización de cambios necesarios en nuestra ciudad sobre la materia que le corresponde. Y ha sido este cambio el que me ha animado a escribir este pequeño artículo que quiere ser un halago a dos grandes amigos y personas que desde hace muchísimos años luchan por mejorar las condiciones de nuestro entorno natural. Sus nombres son: “Juan Redondo y Jesús Gordillo”, cuya amistad me enorgullece.

Javier Díez Nieto Vacia

He leído que se ha producido otra nueva reestructuración del gobierno de la ciudad, y que un área tan importante como es la del medio ambiente se encuentra ahora bajo la dirección de un nuevo consejero. Esperemos que esta vez el cambio sea de mejora para dicho departamento y empecemos a ver la realización de cambios necesarios en nuestra ciudad sobre la materia que le corresponde. Y ha sido este cambio el que me ha animado a escribir este pequeño artículo que quiere ser un halago a dos grandes amigos y personas que desde hace muchísimos años luchan por mejorar las condiciones de nuestro entorno natural. Sus nombres son: “Juan Redondo y Jesús Gordillo”, cuya amistad me enorgullece.

Muchos pensadores a lo largo de la historia de la humanidad han considerado desde siempre que...“ Lo bueno, es todo lo que se conforma a la Naturaleza y es favorable para la vida". Por ello la necesidad de conformar  la actividad humana con la naturaleza es una “Lex Naturalis”, es decir, un precepto o regla general que prohíbe al hombre hacer aquello que sea destructivo para la naturaleza. Ha existido por tanto, una necesidad ya histórica del pensamiento humano razonado en la conservación del medio ambiente.

Porque… en realidad, lo único que existe global en la naturaleza es la interrelación, siempre muy  estrecha entre los sucesos evolutivos ocurridos en la tierra desde hace cientos de millones de años en los que el hombre no ha dejado de ser un elemento más. Sin embargo, la intervención del hombre, gran consumidor y destructor, está produciendo un gasto energético enorme, que produce irrecuperables pérdidas en la naturaleza degradando exponencialmente la naturaleza. Pero el equilibrio de tipo dinámico natural, principio básico del medio ambiente para su conservación, hace necesario conocer cuánto es lo que se gasta y cuánto lo que se produce, ya que pensar en la duración indefinida e inagotable de los ciclos biológicos sostenidos, es un pensamiento totalmente falso. Es necesario, por tanto que nuestra ciudad realice eficaces políticas locales de respeto a su entorno natural.

La realidad es que aquí estamos asistiendo a un aumento exponencial de nuestra demografía y a su lógico proceso de urbanización, que nos están mostrando lo limitado de nuestros recursos naturales. Es por ello necesario que todos nos impliquemos seriamente en su defensa. Ya sé, que esto es sin duda, más fácil de decir que de hacer, puesto que si queremos vivir de una determinada forma, conforme a la lícita búsqueda del bienestar es preciso que no seamos solamente nosotros los que debamos ajustarnos al medio ambiente, sino que es necesario que este también se adapte a nosotros. Por ello es urgente, buscar soluciones inteligentes para todos y para todo.

Y es en todas estas soluciones inteligentes y experimentadas, donde los conocimientos de gentes como Juan Redondo y Jesús Gordillo son necesarios, ya que llevan muchos años observando y analizando estos problemas y saben mucho de todo esto. Esta lucha es la que les hace merecedores de un gran reconocimiento y apoyo, ya que en el fondo están luchando por todos nosotros. Pero para ello es preciso que sus principios e ideas sean aceptados y conocidas, consolidándose en la opinión pública. Porque esta lucha que están realizando no resulta nada fácil, pero creo que su voz y posibles soluciones deben ser oídas en esos despachos del Medio Ambiente de la ciudad autónoma de Ceuta.

Esperemos que el nuevo cambio de consejero permita que sean escuchados en nuestro ayuntamiento, porque seguro…seguro… que si esto es así, todos saldremos ganando.