En el rescate de los ochos migrantes, los agentes de la Guardia Civil se lanzaron al agua en un intento desesperado por poner a salvo a los seis hombres y las dos mujeres que ocupaban la precaria embarcación sobre la que trataban de ganar territorio español.
Entre un oleaje intenso y arriesgando la propia vida, los agentes del cuerpo consiguieron sacar del agua a todos los náufragos. El episodio concluyó con cinco agentes heridos por contusiones y problemas respiratorios.
Los guardias vigilaban desde tierra las evoluciones de la embarcación. Tras el vuelco de la balsa, y ante la imposibilidad de que la patrullera del Servicio Marítimo pudiera aproximarse a ellos sin riesgo de chocar contra las rocas, los agentes decidieron arrojarse al mar.
La multinacional española de servicios portuarios, la empresa Consulmar con más de 60 años de experiencia y presencia en diversos puertos de la península y el continente africano, con sede en Bilbao, cuenta con más de 160 trabajadores empleados en diversas actividades del sector marítimo, así como con 20 embarcaciones destinadas a diversas actividades portuarias, principalmente servicios de amarre y de suministro a buques en fondeo en los puertos de Algeciras, Bilbao, Bissau, Cádiz, Castellón, Tánger Med y Ceuta. En este último puerto, Consulmar lleva ya más 4 años trabajando como socio junto a Amarres Ceuta en el suministro de provisiones y transporte de tripulantes y técnicos a buques fondeados en la bahía, a través de su filial Workboat Services Strait, habiendo sido pionera en el lanzamiento del servicio denominado “Off Port Limits Ceuta”, atendiendo con lanchas desde Ceuta a buques en tránsito por el Estrecho de Gibraltar sin que tengan que desviar su ruta.