Los hechos tuvieron lugar el pasado domingo, sobre las 07:45 horas, cuando la Policía Local de Palencia realizaba un control rutinario, en la Plaza Rabí Sem Tob, Al llegar al mismo, un turismo, marca Volkswagen, modelo Golf, de color negro, ocupado por dos individuos, se dio a la fuga a gran velocidad, dirigiéndose por la Avenida de Valladolid hacia la Avenida Cardenal Cisneros. Los individuos que viajaban en el mismo lo aparcaron, lo cerraron y huyeron a pie.
LaPolicía Local trató de identificar el vehículo, con matrícula de Ceuta, solicitando información a la Policía Nacional, para tramitar la correspondiente sanción por haber cometido una infracción grave contra la seguridad vial. La Policía local fue informada de que la titular del coche era una mujer residente en Ceuta.
Posteriormente, en la Jefatura de la Policía Nacional se tuvo conocimiento, el domingo, que la propietaria del turismo intervenido había presentado en la Jefatura de Ceuta una denuncia por la desaparición de su esposo y del coche, lo que puso en aviso a los agentes policiales, que decidieron trasladar el vehículo a las dependencias de la Policía Nacional. Tras abrirlo, encontraron una bolsa grande de plástico en cuyo interior había otras nueve más pequeñas, conteniendo en total 994 bellotas de hachís, con un peso de 10, 295 kilogramos, valorados en 65.000 euros.
Las posteriores investigaciones de los agentes de la Comisaría de Palencia han dado como resultado que el vehículo viajó desde la ciudad autónoma de Ceuta con dos pasajeros el sábado 15, atravesando el Estrecho de Gibraltar en barco hasta Algeciras. Desde allí se trasladaron por carretera hasta Palencia, donde llegaron a primera hora de la mañana del domingo. Todo indica que el destino de los más de 10 kilogramos de hachís iban a ser distribuidos en pequeñas dosis en la capital palentina
La Policía Nacional ya ha identificado a los dos individuos que ocupaban el coche y que lograron huir tras abandonarlo, habiéndose tramitado la correspondiente orden de busca y captura contra ambos, que al igual que la mujer propietaria del coche, son naturales de Marruecos, aunque con nacionalidad española y residentes en Ceuta. Uno de ellos tiene antecedentes por tráfico de drogas y ha sido detenido en varias ocasiones anteriores.
