El Ministerio del Interior ha vuelto a atribuir conductas violentas a los migrantes que logran franquear la valla fronteriza. En esta ocasión, Interior asegura que los jóvenes subsaharianos que esta mañana lograron entrar en la ciudad a través del cercado arrojaron a los agentes recipientes de plástico con excrementos, sangre, cal viva y ácidos.
Instantáneas remitidas a los medios por el Ministerio del Interior (Mº INTERIOR/G.CIVIL)
Según el relato contenido en una nota de prensa remitida por Interior, los migrantes utilizaron cizallas y mazos para violentar la valla. El Ministerio asegura que siete guardias civiles han precisado asistencia médica en el Hospital Universitario. Dos de ellos han sido dados de baja. Cinco de los migrantes también fueron asistidos en el centro hospitalario.
El comunicado va acompañado de cuatro fotografías en las que se exhiben, entre otros utensilios, botellas de plástico, un martillo y guantes además de los daños ocasionados en la valla.