Adiós a la ropa de abrigo y a las estufas, hola a la manga corta y a los ventiladores y aires acondicionados. Llega el verano y yoca hacer lo posible por disfrutar de las mejores temperaturas posibles, como también cambiar la dieta alimenticia para degustar aquellos platos típicos de esta época tan peculiar.
Ni que decir tiene que una de las propuestas culinarias más habituales durante estos meses es el gazpacho, cuya receta puedes encontrar en http://gazpachoandaluz.top. Esa mezcla de ingredientes tan mediterránea se convierte en uno de los platos estrella de estos días donde el calor lo invade todo y en los que siempre apetece tomar algo diferente y, a ser posible, refrescante.
Pero no es lo único que podemos comer en verano. De hecho, hay gran cantidad de platos diferentes que se convierten en los más adecuados para estas jornadas de calor, piscina, playa y sol. Numerosos portales web recogen recetas que encajan a la perfección con los menús veraniegos; de hecho, hay un buen puñado de ellas en la web de recetasgratis.net. No obstante, nosotros hemos decidido que, para ponértelo fácil, te vamos a dar los mejores platos para comer en los días de calor
Gazpacho
Lo hemos mencionado y merece estar en la primerísima posición de esta lista. El gazpacho andaluz tiene su origen en esta comunidad autónoma que se encuentra al sur de la Península Ibérica, y es uno de los platos que más piden los comensales en bares, en restaurantes y en casa de sus padres si es posible.
Una mezcla de tomates maduros, pimiento verde, cebolla, aceite de oliva y un poco de vinagre que se trituran hasta conseguir una especie de sopa ligera que suele acompañarse con pan o picos. En muchos hogares, de hecho, se almacena en grandes fuentes con hielo para servirse como bebida, tomándose en vaso en lugar de en platos soperos.
Porra/Salmorejo
Otro de los platos más famosos del verano y el protagonista de cierta rivalidad entre determinados territorios andaluces. La porra, o salmorejo, es una evolución del gazpacho andaluz, pero con un espesor mucho mayor debido al uso del pan como uno de sus ingredientes. Es una mezcla de ajo, aceite de oliva, vinagre, sal, miga de pan, tomate y, en determinadas regiones, pimiento verde.
Es un plato bastante más contundente que el gazpacho, aunque posea un sabor y una composición ligeramente similares. Sin duda, una comida imprescindible del verano y una de las más famosas de la gastronomía mediterránea. Como dato adicional, podemos decirte que también se hace cambiando el tomate por naranjas u otros ingredientes.
Tortilla de patatas
Huevo bien batido, patatas cortadas en tacos y hechas en la sartén y, en función de los gustos, una pizca de cebolla para reforzar el sabor. Las tortillas de patatas son algo tan famoso de nuestro país que, fuera del mismo, se las conoce como tortillas españolas. Desde luego, no hay bar ni restaurante que no las ofrezca durante todo el año, especialmente durante el verano.
Muchos llegan a combinarla con el plato anterior, y es que en localidades como Córdoba son muy propensos a pedir o hacer tortilla de patatas y salmorejo para usar este último como salsa en la que mojar la mezcla de huevo y patata. El resultado es algo que vale la pena ser probado una vez. Aunque luego repetirás.
Ajoblanco
El ajoblanco es un plato archiconocido tanto en territorio andaluz como extremeño. Para muchos es, de hecho, la sopa fría por excelencia, ideal para cenar y acompañar con algo de embutido o cualquier otra comida ligera. Sus ingredientes son una mezcla de lo más peculiar: ajo, aceite de oliva, vinagre, pan y almendras. Una composición realmente económica que delata los orígenes humildes de esta comida.
A la hora de ponerse manos a la obra y comer, una combinación bastante interesante es la del ajoblanco con uvas peladas y sin pepitas. Hay quienes llegan a introducirlas directamente en el plato para saborearlas mientras devoran esta sopa fría.
Pulpo a la gallega
Nos vamos del sur al norte de España para hablar de otra de las comidas más famosas del país durante todo el año, pero también de una de las más solicitadas en los meses de calor. El pulpo a la gallega (polbo á feira en gallego) es el gran plato de Galicia y uno de nuestros inconfundibles sellos gastronómicos a nivel internacional.
Su preparación se basa en cocer un pulpo entero, a ser posible en olla de cobre, para que su carne se ablande lo suficiente como para ser fácilmente comestible. Tras esto, se corta en rodajas y se sirven sobre un lecho de patatas también en rodajas. Ah, y que no falte el pimentón espolvoreado.
Cinco platos que, si no has probado todavía, debes apresurarte por disfrutar durante el verano. Te aseguramos que, una vez los pruebes, vas a fichar a más de uno para tus comidas habituales.
