En esta primera comparecencia en la Comisión de Sanidad, la ministra ha hecho un apartado para anunciar el desbloqueo de las obras, que hasta ahora constituyen una verdadera odisea.
A comienzos de 2018 se cumplieron cinco años del abandono de las obras de ampliación y reforma de este centro de salud. Un proyecto que se inició con su licencia de obras, su dotación de crédito presupuestario y su acta de replanteo.
La obra quedó paralizada, como el nuevo Hospital de Melilla y como otras muchas obras en España, pocos meses después y sin haberse construido prácticamente nada, quedando patente la incapacidad del Ingesa para solventar los problemas que se presentaron.
Según informó en su momento la UGT, se intentaron soluciones descabelladas, como cuando especularon con la posibilidad de efectuar reformas en el antiguo ambulatorio “José Lafont” y trasladar provisionalmente a dicha ubicación la actividad del centro de salud mientras durasen las obras, pero sin tener en cuenta la antigüedad, el abandono y la precariedad de un edificio de más de cincuenta años, para declarar tiempo después que las instalaciones del viejo centro no eran las idóneas.
En fechas recientes los responsables del Ingesa anunciaron, que salvo imprevistos, las obras se arrancarían en el primer trimestre de 2018 y que tendrían una duración de 30 meses.
Tras el anuncio de la ministra, ahora sólo cabe esperar en qué fecha se produce el desbloque de estas obras que son más que necesarias para un centro de salud que atiende a una buena parte de la población ceutí.
