El pleno de la Asamblea ha sancionado hoy, con los votos en contra de PSOE, Caballas y MDyC y la abstención de Ciudadanos, la aprobación definitiva de la modificación del Impuesto sobre la Producción, los Servicios y la Importación (IPSI) que ya recibió el visto bueno provisional de la Asamblea el pasado noviembre. Según explicó en su día el Gobierno local, la modificación pretende convertir Ceuta en un centro tecnológico mediante la incentivación fiscal. El Gobierno aspira a que las empresas dedicadas al sector del juego online encuentren un entorno favorable para asentarse en la ciudad.
La propuesta plantea la aplicación de un tipo súper reducido del 0,5% para servicios de asesoramiento y tratamiento de datos y suministro de información en relación con las operaciones de juego online. El mismo tipo del 0,5% se aplicará también a otros servicios como los de publicidad o similares, de atención al cliente –los conocidos como “call centers”- o aquellos prestados por vía electrónica (alojamientos de sitios web, mantenimiento a distancia de programas y equipos o acceso a descarga de contenidos, entre otros).
Críticas de la oposición
El documento ha salido adelante no sin las censuras de la oposición. Así, el portavoz del PSOE, Manuel Hernández, ha asegurado echar en falta una reforma más global y “rigurosa” del impuesto que recoja las reivindicaciones de los grupos políticos y los agentes sociales.
Hernández también ha mostrado su preocupación por la incentivación de la ludopatía que podría entrañar la expansión de las actividades del juego en la ciudad, una objeción compartida por el resto de formaciones representadas en la Asamblea. Así, el diputado de Caballas, Juan Luis Aróstegui, ha reclamado medidas efectivas para frenar las adicciones y ha acusado al Gobierno de “fomentar” el juego con sus medidas fiscales. “En casi todos los lugares con cierta sensibilidad social hay iniciativas tendentes a prohibir la publicidad del juego, pero aquí el pleno de la Asamblea de Ceuta dice que no, que nosotros más chulos que nadie”, ha reprochado Aróstegui.
En la misma línea, la portavoz de MDyC, Fátima Hamed, ha reclamado una acción preventiva contra la ludopatía que atienda a sus potenciales víctimas desde edades muy tempranas.
Hamed también ha criticado que el Gobierno haya introducido “de rondón” una rebaja fiscal para las actividades publicitarias, que ha calificado de “electoralista”, y ha vuelto a recordar la promesa incumplida de abaratar el IPSI a más de 600 artículos.
El diputado de Ciudadanos Javier Varga ha clamado por la recuperación de los tipos de IPSI vigentes antes de 2012, es decir, los previos a la crisis. Varga ha valorado la intención del Gobierno de atraer a la ciudad a las empresas dedicadas al juego online pero ha expresado sus dudas, al igual que minutos antes hiciera Hamed, sobre la reducción de los tipos impositivos a las actividades publicitarias.
Varga ha instado a adoptar medidas contra la ludopatía pero ha exhortado a no hacer un “uso demagógico” de lo que ha presentado como un problema social.
La consejera de Economía y Hacienda, Kissy Chandiramani, ha acusado a la oposición de recurrir a la demagogia. Chandiramani ha insistido en que la reforma fiscal pretende atraer a empresas radicadas en Malta y Gibraltar y ha negado que eso suponga la apertura en la ciudad de casas de apuestas. “Es una medida muy potente para cambiar nuestro tejido productivo”, ha defendido la consejera.
