cuatro años de retraso

El satélite espía español PAZ, por fin en el espacio

Tras más de cuatro años de retraso y tres intentos fallidos en menos de una semana, el satélite de Observación de la Tierra PAZ ha salido de la Base Aérea estadounidense de Vandenberg, en California. La famosa compañía aeroespacial estadounidense Space X se ha ocupado del lanzamiento. 

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photo_camera El satélite español PAZ ha sido lanzado en un cohete Falcon 9 de la empresa Space X (ESTRELLA DIGITAL)

El satélite de Observación de la Tierra PAZ ha conseguido salir al espacio. A las 15.17 hora peninsular española, el Falcon 9 de la empresa Space X que lleva el sistema español ha salido desde la Base Aérea de Vandenberg, en California, para conseguir ponerse en órbita. 

Es la cuarta vez que la empresa de Elon Musk trata de poner en el espacio el satélite español, tras tres intentos fallidos en los últimos cinco días. Pero ni la meteorología que impidió el lanzamiento ayer ni los fallos técnicos, asociados a los otros dos satélites que compartían lanzamiento con el Paz, han dado problemas este jueves y el lanzamiento se ha producido sin ninguno de estos problemas. 

Con una puntualidad perfecta, el cohete Falcon 9 de Space X que porta el satélite PAZ despega de la Tierra para colocarse a más de 500 kilómetros de la Tierra y comenzar a retransmitir información, datos e imágenes durante el día y la noche y completamente ajeno a las variaciones meteorológicas. La preocupación ahora es que consiga colocarse en la órbita prevista y que los enlaces de información lleguen de manera correcta con los sistemas terrestres, que son gestionados por el INTA. Aun así, tardará aún cinco meses en estar plenamente operativo, según confirman fuentes de Airbus, la empresa que ha fabricado el satélite en España. 

El PAZ se ha lanzado con un cohete reutilizado, al menos en su primera etapa. Es la fórmula de lanzamiento que ha desarrollado Space X, con el objetivo de poder volver a usar partes de los cohetes utilizados en lanzamientos anteriores. En este caso, la primera etapa de propulsión del Falcon 9 no se recuperará en el Pacífico, dado que no se han situado plataformas en el Pacífico para recogerlas. 

Durante los cinco primeros días, el satélite español estará controlado desde el Centro de Operaciones Espaciales alemán (GSOC), desde donde se supervisará la aproximación a la órbita de referencia. Después, será España quien tome el control de su satélite espía desde el Centro Espacial INTA Torrejón (CEIT), el Centro de Usuarios de Defensa, situado en el Centro de Sistemas Espaciales de Observación (CESAEROB) del Ejército del Aire y el Centro de Respaldo, donde se ubican los sistemas de respaldo de las funciones críticas de operaciones de vuelo, situado en las instalaciones del INTA en Maspalomas (Canarias), explica el Instituto de Técnica Aeroespacial “Esteban Terradas” en su ‘Boletín de Noticias’ nº 36.

Ucrania, origen del retraso de cuatro años

La puesta en órbita del satélite se ha producido con cuatro años de retraso. El complejo aparato, réplica de los satélites alemanes TerraSAR-X y TanDEM-X, estaba listo para ser lanzado hace más de cuatro años, pero “un largo proceso y algunos contratiempos ajenos a la voluntad de los responsables españoles, y relacionados con el conflicto entre Rusia y Ucrania” lo impidieron, según el INTA.

Las previsiones de Hisdesat, la empresa público-privada que se encarga de servicios satelitales para seguridad, defensa, inteligencia y asuntos exteriores, eran lanzar el satélite en el primer semestre de 2014. Así se fijaba en el contrato con la empresa rusa ISC Kosmotras, la empresa rusa que ya se había encargado del lanzamiento de los satélites alemanes TerraSAR-X y TanDEM-X en 2007 y 2011.

Pero con el estallido del conflicto en Ucrania, la anexión de Crimea por parte de Rusia y la imposición de sanciones por parte de Europa a Moscú, el Kremlin nunca autorizó la salida del satélite español. Tampoco la denegó, con lo que el tiempo iba pasando sin ninguna respuesta desde Moscú para el lanzamiento del satélite español.

Tres años después, Hisdesat culminó las negociaciones para lanzar su satélite con la compañía de Elon Musk, ahora mundialmente conocida tras poner en el espacio un coche de Tesla -otra de sus marcas-, pero que lleva invirtiendo e investigando en el lanzamiento de cohetes al espacio varios años.

Un proyecto de 2007

Once años después de su puesta en marcha, el Programa Nacional de Observación de la Tierra por satélite (PNOTS) ve cómo su parte radar se pone en funcionamiento. Un acuerdo entre los Ministerios de Defensa e Industria en el año 2007 impulsó la puesta en marcha de esta iniciativa, a la que aún falta una segunda pata: el satélite INGENIO, que se encarga de la parte óptica del sistema y que continúa en construcción en la factoría de Airbus en Barajas.

De momento, los sistemas de radar del PAZ proporcionarán tres tipos de imágenes: Stripmap imágenes de 50x30km de hasta 3 metros de resolución; Spotlight, que incrementa la resolución hasta 1 metro a costa de reducir el área del producto a 5x5km y 10x10km y Scansar, imágenes de 150x100km de hasta 18 metros de resolución (lo que supone mayores coberturas a costa de pérdida de resolución).

“Nos encontramos, pues, ante la culminación de un gran programa de INTA y, a la vez, el inicio de otro reto: la vida operativa del satélite PAZ que esperamos sea exitosa”, desea el INTA en su boletín.