Ingesa no ha vuelto a la normalidad deseada tras el anuncio en marzo de suspender las consultas de Atención Primaria y Atención Especializada en función del Plan de Contingencia puesto en marcha con motivo de la pandemia de coronavirus. Muchas consultas y pruebas complementarias no consideradas de urgencia se han pospuesto desde entonces.
Sin embargo, hay excepciones por el riesgo que tienen algunas patologías que tampoco se están teniendo en cuenta y que dan como resultado que la asistencia al enfermo no covid sea deficiente.
Es el caso de un enfermo crónico cardiológico de 78 años que ha presentado una queja este miércoles en la oficina de atención al paciente del Hospital Universitario por no haber podido pasar la consulta programada con su especialista ni haber recibido ningún tipo de advertencia o información al respecto.
Este paciente, que sufre una cardiopatía isquémica y tiene implantados cuatro stands FA, tenía programada una consulta telefónica con el cardiólogo este martes 6 de octubre y debía recibir la llamada telefónica a las 12:50 horas, cosa que no sucedió. El día anterior, el paciente se había desplazado hasta el Servicio de Cardiología del HUCE donde entregó los resultados del electrocardiograma que debía hacerse por prescripción médica.
Por este motivo, el usuario ha presentado la correspondiente denuncia en el hospital en los siguientes términos: "Teniendo en cuenta las dificultades que existen para poder cumplir con el horario previsto de las consultas y más en los tiempos actuales, he esperado pacientemente la llamada prevista dada la importancia que para mi tenía la misma, pero una vez transcurrido un periodo de tres horas sin producirse la misma y ni siquiera una llamada telefónica para advertirme que por los motivos que fueran, la misma no se iba a producir, he decidido recuperar las labores que había aparcado para atender debidamente la llamada del Servicio de Cardiología". Y continúa "y es por lo que en defensa de los derechos que me asisten, denuncio la falta de responsabilidad, de ética y de deontología profesional mostrada por el Servicio de Cardiología del HUCE en el caso que nos ocupa, pues se exige a los enfermos el cumplimiento de todas las obligaciones a su acomodo y conveniencia pero no así, el cumplimiento de las suyas, mostrando una falta total de cariño y de humanismo sobre un colectivo que tan necesitado está de estas cualidades, las cuales se hubiesen podido recuperar, simplemente con una llamada telefónica y una explicación razonada".
Del mismo modo, el paciente ha solicitado información de la situación en la que queda la consulta "programada y no realizada".
La última vez que fue atendido este paciente fue el pasado 22 de junio por el doctor Miralles Ibarra. Tras pasar revisión presencial del estado de sus dolencias cardiológicas se fijó nueva revisión para este 6 de octubre, debiendo realizar antes de la fecha las pruebas de Holter para valorar estabilidad de ritmo sinusal y ecocardiograma, pruebas a las que se sometió puntualmente los días 28 y 29 del pasado mes de septiembre.
