El sueño de convertir Ceuta en escala de cruceros, laminado por el virus

En todo caso, la idea de hacer de Ceuta una escala del crucerismo internacional no naufragará, si lo hace finalmente, solo por la declaración de la pandemia y sus consecuencias. Los resultados que se habían obtenido el pasado año no invitaban al optimismo.

El crucero "Pacific Princess", atracado en el puerto de Ceuta (C.A./ARCHIVO)
photo_camera El crucero "Pacific Princess", atracado en el puerto de Ceuta (C.A./ARCHIVO)

El sueño de convertir Ceuta en una escala de referencia para cruceros internacionales se disipó el pasado mes de marzo con la inopinada irrupción de la crisis del coronavirus. La paralización del sector impuesta como medida preventiva frente a la pandemia obligó a postergar los proyectos que la Autoridad Portuaria y la Ciudad albergaban para el desarrollo de una actividad que sirviera de acicate al desarrollo de la industria turística local.

Los cruceros han vuelto a navegar con la prioridad de garantizar la seguridad de sus pasajeros. La situación continúa siendo delicada, sin embargo. De hecho, ya se han registrado brotes de coronavirus a bordo de varios cruceros. Aunque el sector internacional confía en recuperar progresivamente la actividad, lo cierto es que los datos resultan desalentadores: en los primeros seis meses del año llegaron a los puertos españoles 579 cruceros frente a los 1.909 que lo hicieron en el mismo periodo de 2019.

En todo caso, la idea de hacer de Ceuta una escala del crucerismo internacional no naufragará, si lo hace finalmente, solo por la declaración de la pandemia y sus consecuencias. Los resultados que se habían obtenido el pasado año no invitaban al optimismo.

El Puerto cerró 2019 con cifras que no llamaban a la esperanza. Ceuta solo contabilizó durante el año pasado la escala de siete cruceros. En 2018, el número de escalas llegó a las once.

Ya el pasado año los sindicatos se mostraban escépticos ante la posibilidad de que las inversiones en el sector de los cruceros resultasen rentables en Ceuta. Según aseguraba entonces la Federación de Sindicatos de Empleados Públicos (FESEP), los esfuerzos realizados hasta entonces no habían arrojado sino resultados negativos para el Puerto.  

El potencial de un nuevo muelle para cruceros y los esfuerzos que Servicios Turísticos desarrolló a lo largo de los últimos tiempos para mejorar la atención y los servicios a los cruceristas no podrán ser sometidos a prueba mientras la industria no se estabilice. Mientras, Ceuta, sumida en una crisis económica que quizá no tenga parangón en la historia reciente de la ciudad, sigue buscando salidas para garantizar su supervivencia.