Juan Vivas ha enumerado algunas prioridades de Pablo Casado para Ceuta. Una de ellas es “llevar a cabo por parte del Estado una acción enérgica en materia de dotaciones y de medios para que la frontera y el puerto sean dos infraestructuras del siglo XXI: sean seguras y eficaces”.
Explica que la eficacia es para “controlar debidamente la presión inmigratoria de tal manera que la frontera no esté en el puerto sino en el Tarajal” y también “eficaces para el desarrollo económico, que no sean un problema sino una oportunidad”.
El PP defiende la presencia “vigorosa” de la Administración General del Estado en Ceuta, que se traduce en "más sanitarios, más profesores y educadores, más guardias civiles y policías, más militares y funcionarios de prisiones, más jueces y magistrados”, en mayor presencia del Estado en Ceuta, afirma el presidente popular.
Sobre el REF “nadie puede dar lecciones el Partido Popular”, ha dicho Vivas, y añade que “le vamos a dar otra vuelta más al Régimen Económico y Fiscal especial para incentivar la localización de empresas en la ciudad y ayudar a los comerciantes”.
También ha tratado el tema de los MENA: según Vivas este es “una asunto de interés y alcance nacional directamente asociado a la presión migratoria”. Se ha referido a que Ceuta no puede soportar mayor carga de la que existe en el resto de España. Si es presión migratoria –señala- las cargas que se deriven deben de ser “repartidas de manera justa y equitativa entre todas las comunidades y ciudades autónomas del conjunto de España”.
Ceuta "no puede tener una presión superior a su capacidad de acogida" y eso se conseguirá -dice- dándole al asunto la consideración de cuestión de interés nacional “regulado para toda España”. Vivas asegura que “Intensificaremos los contactos con marruecos por el interés del menor y para su reagrupamiento familiar, el retorno del menor a su país de origen".