Opinión

Sobre los perjudicados

El caso de Loma Colmenar acrecienta su interés con cada revelación del proceso judicial. La declaración en la mañana de hoy ante la juez en calidad de testigos del consejero de Fomento, Néstor García, y de un trabajador de la empresa municipal de la vivienda, Emvicesa, constituye el siguiente hito de una historia que todavía dará mucho de sí.

El caso de Loma Colmenar acrecienta su interés con cada revelación del proceso judicial. La declaración en la mañana de hoy ante la juez en calidad de testigos del consejero de Fomento, Néstor García, y de un trabajador de la empresa municipal de la vivienda, Emvicesa, constituye el siguiente hito de una historia que todavía dará mucho de sí.

La incertidumbre se cierne ahora sobre el futuro sorteo de las viviendas de la promoción pública, el procedimiento que la Ciudad ha elegido después de que estallara el escándalo. El portavoz del Gobierno ya anunció que el acto se celebraría esta misma semana, aunque la decisión última queda en manos de la juez.

En todo caso, y atendiendo a la posibilidad de que la magistrada resuelva finalmente la paralización del sorteo como medida cautelar, los primeros perjudicados volverán a ser los aspirantes a una vivienda que asisten, perplejos, a la manera en cómo la ineptitud –o un vicio que va más allá de aquélla- ha convertido un trámite administrativo simple en toda una odisea. No hay manera de cuantificar la angustia y la desazón de toda esa gente para quienes conseguir una vivienda digna es una cuestión vital. Ninguna de estas personas será compensada por este sufrimiento innecesario.

Las declaraciones ante la juez continúan. Todos aguardan a que, más pronto que tarde,  se arroje alguna luz sobre este escandaloso caso.