Opinión

Visitantes

La Universidad de Granada ha proporcionado a la Ciudad un caudal de información sobre hábitos y preferencias del turista marroquí que visita Ceuta cuyo valor estará determinado por su uso. Las conclusiones de la investigación aportada por la institución universitaria trazan un camino a seguir para garantizar la fidelidad del vecino mercado de consumidores que debería emprenderse sin dilaciones.

La Universidad de Granada ha proporcionado a la Ciudad un caudal de información sobre hábitos y preferencias del turista marroquí que visita Ceuta cuyo valor estará determinado por su uso. Las conclusiones de la investigación aportada por la institución universitaria trazan un camino a seguir para garantizar la fidelidad del vecino mercado de consumidores que debería emprenderse sin dilaciones.

No hace mucho que las instituciones y el empresariado ceutí han comenzado a percibir la importancia que para la economía local comporta la figura del turista procedente del otro lado de la frontera. El tradicional menosprecio hacia el visitante marroquí se ha transformado, como por ensalmo, en avidez por seducir a un número mayor de consumidores llegados desde la vecina Tetuán o, por qué no, desde otras ciudades del país vecino más alejada.

El deseo está forjado y ahora sólo resta proporcionar los medios para que visitar Ceuta constituya una experiencia satisfactoria y apetecible para quienes, ya sin duda, se erigen como uno de los activos más apetecidos por los empresarios del turismo y el comercio.

Amén de la que cabe a los empresarios, que han de actuar por propio interés, las instituciones públicas tienen la responsabilidad de consolidar una fuente de riqueza que hasta hace no mucho había pasado inadvertida. Puestos a la tarea, podrían comenzar por la entrada a la ciudad. Una frontera digna sería el primer paso.