Opinión

Habrá que ponerle cara a Tragsa

Es ya de lo más común en la ciudad ver como casi a diario se le encomiendan todo tipo de labores a la empresa pública TRAGSA, este tipo de encomiendas, tiene su cabida en el derecho administrativo y es utilizado en más de una ocasión para agilizar la ejecución de proyectos sin mediar licitación, en cuyo caso se demorarían generando el pertinente perjuicio.

Juan Redondo
photo_camera Juan Redondo

Es ya de lo más común en la ciudad ver como casi a diario se le encomiendan todo tipo de labores a la empresa pública TRAGSA, este tipo de encomiendas, tiene su cabida en el derecho administrativo y es utilizado en más de una ocasión para agilizar la ejecución de proyectos sin mediar licitación, en cuyo caso se demorarían generando el pertinente perjuicio. Como digo hasta ahí todo legal, pues esta empresa vendría a tener el mismo estatus que el de una empresa municipal aunque la Ciudad solo posea una acción de la misma.

Ahora bien, en todo este asunto habrá que pedir mucha más transparencia y sobre todo empezar a ponerles cara a los responsables ejecutivos de esas encomiendas. La pregunta que se nos antoja en todo este asunto es clara ¿son de la ciudad o foráneos estos responsables?, porque según se desprende de las declaraciones realizadas en más de una ocasión por el presidente del Colegio de Arquitectos de Ceuta, al parecer ninguno de sus asociados ha participado en el proyecto de la Gran Vía.

En cualquier caso TRAGSA no es una empresa nueva en la ciudad, llevan aquí instalados bastante años, dedicados fundamentalmente a proyectos medioambientales, caso del acondicionamiento de las palmeras ubicadas en la ciudad afectadas por la plaga del “picudo rojo” labor para la cual, tuvieron que desplazar a Ceuta, un importante número de trabajadores cualificados procedentes de la península, algo comprensible al tratarse de un trabajo muy concreto que requería de la presencia de un personal muy especializado, lo que ya no lo resulta tanto, es que para la ejecución de una obra con las características de la Gran Vía, no se cuenta con especialistas locales, que para ese tipo de labor, sí que se cuenta en Ceuta.

Es evidente que con TRAGSA el Gobierno local ha encontrado la solución a muchos de sus problemas, al ofrecerle está la vía legal que le permite ahorrarse infinitos trámites y papeleo en licitaciones y concesiones, da la sensación que tendremos de esta empresa para rato, bien realizando trabajos tanto bajo esa denominación como bajo la forma de alguna de sus filiares, como así ocurre con un proyecto concreto de la Agenda 21 sobre Lic-Zepa, proyecto ejecutado en su día por Prointec y que ahora se retoma sorprendentemente de nuevo. Habrá que ver cuál es el motivo, pero desde luego una vez más Tragsa aparece también vinculada a la tarea.