La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) ha expresado su preocupación a la Delegada del Gobierno en Ceuta, Cristina Pérez Valero, sobre la peligrosa situación que enfrentan los guardias civiles debido a la inmigración irregular. Cada semana, los guardias civiles de Ceuta arriesgan sus vidas en operaciones de rescate de inmigrantes que, impulsados por la desesperación, se lanzan al mar desde Marruecos.
El Secretario General Provincial de la AUGC en Ceuta mantuvo una reunión con la delegada del Gobierno para discutir la alarmante situación de los inmigrantes que mueren intentando nadar alrededor de los espigones de Benzu y el Tarajal. Muchos de estos inmigrantes, incluyendo menores de edad, se lanzan al mar en condiciones climáticas adversas, poniendo en grave riesgo sus vidas y las de los guardias civiles que acuden en su rescate.
La Delegada del Gobierno confirmó que las autoridades marroquíes han comenzado a aceptar nuevamente a los inmigrantes procedentes de Marruecos que son interceptados durante la travesía a nado. La AUGC considera que esta colaboración entre países es esencial para minimizar los trágicos incidentes que ocurren en estos espigones, conocidos como ‘de la muerte’ y ‘la vergüenza’, especialmente desde el cierre de la frontera hace cuatro años.
Además, la Delegada del Gobierno informó que se están esperando los resultados de los informes técnicos sobre la ampliación y reforma de los dos espigones, una situación que la AUGC ha estado denunciando desde la tragedia del 6 de febrero de 2014. La AUGC también ha solicitado un estudio para evaluar la posibilidad de establecer infraestructuras de apoyo para las unidades del Servicio Marítimo y el GEAS en las dos playas, con el objetivo de reforzar la vigilancia y generar un efecto disuasorio.
La AUGC ha reiterado la urgente necesidad de construir una nueva Comandancia y de contar con más recursos humanos y materiales. Este sábado, 16 de marzo, miles de policías y guardias civiles se concentrarán en Madrid para reclamar más derechos en cuanto a la profesión de riesgo, la equiparación salarial y la jubilación digna.
La AUGC, decana de las asociaciones profesionales y mayoritaria en afiliación en la Guardia Civil, tiene representación en todo el territorio español y en todas las unidades y especialidades del Cuerpo. Desde la llegada de la democracia, ha liderado el movimiento asociativo, naciendo como un sindicato clandestino. Su lucha por la democratización de la institución le valió en 2010 el Premio Nacional de Derechos Humanos concedido por la Asociación Pro Derechos Humanos de España (apdhe).
