CSIF denuncia que el Gobierno de la ciudad pone obstáculos y trabas a su labor sindical, “ya sea porque no nos dan la información necesaria y obligatoria, o porque nos escuchan pero automáticamente después hacen lo que quieren o porque nos obligan a diario a acudir a instancias judiciales para intentar de alguna forma que nos escuchen, lo que en la situación judicial actual es postergar muchos meses cualquier acción y nos obliga a gastar muchos recursos económicos”.
La última actuación ha sido la aprobación del capítulo I de los Presupuestos de la ciudad al que el sindicato ha presentado alegaciones. Aseguran que se les convoca a la mesa negociadora con 72 horas de antelación “rozando el límite legal obligatorio”. Tras “un intenso trabajo a contra reloj, presentamos un escrito y solicitamos en dicha mesa explicaciones sobre modificaciones detectadas y no explicadas”. Asimismo, explican que la relación de personal les es entregada en la misma mesa incumpliendo los tiempos obligatorios. “Aun así posteriormente realizamos un estudio del documento y lo entregamos por registro solicitando explicaciones también. Tras el tedioso trabajo realizado y habiendo solicitado varías veces que nos contesten a sendos escritos, no hemos obtenido respuesta alguna”. Unas actuaciones que, aseguran, les han provocado “una indefensión absoluta y un absoluto bloqueo e impedimento de poder realizar la labor a la que sindicalmente estamos obligados”.
CSIF solicita un cambio de actitud “radical” del Gobierno y que “se tome más en serio a las centrales sindicales y el trabajo que necesitamos realizar conjuntamente, siguiendo así, las propias directrices de su partido a nivel nacional”.
