EL Gobierno de Vivas defiende su soberanía ante Marruecos

El Ejecutivo ceutí apoya todas las medidas que se puedan llevar a la práctica para preservar la integridad territorial española

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photo_camera Los presidentes de ambas Ciudades Autónomas (Archivo)


La tensión entre España y Marruecos ha vuelto a escalar después de que la Embajada del Reino de Marruecos en Madrid publicara en su web oficial un mapa de ese país que incluye las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla dentro de su territorio.

El Gobierno de Ceuta ha expresado, mediante un comunicado, su respaldo a las acciones que vayan dirigidas a garantizar el respeto a la soberanía e integridad territorial de España, frente a las pretensiones de Marruecos de incluir a Ceuta y Melilla en su mapa oficial.  «El Gobierno de la Ciudad secunda cuantas actuaciones vayan encaminadas a garantizar el respeto a nuestra integridad territorial y soberanía», señala el comunicado oficial.

Así mismo, El ejecutivo de Vivas ceutí aboga por el mantenimiento de unas buenas relaciones de vecindad y cooperación con el país vecino, siempre que se respeten los límites territoriales, «condición necesaria para el mantenimiento de unas buenas relaciones de vecindad y cooperación que todos deseamos». concluye.

Por su parte, el presidente de Melilla, Juan José Imbroda (PP), había expresado su malestar en las redes sociales, donde recordaba que Melilla tiene una historia española que dentro de un mes, el 17 de septiembre, sumará 526 años ininterrumpidos, «459 años antes de la independencia de Marruecos». Imbroda ha calificado el mapa marroquí de «otra agresión hostil de Marruecos a España», instando al Gobierno de Pedro Sánchez a actuar con firmeza.

El mapa de Marruecos que ha generado la polémica se encuentra en la web oficial de la Embajada liderada por Karima Benyaich, dentro del apartado Marruecos. El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, afirmó el pasado 2 de febrero en Rabat que España y Marruecos habían asumido un compromiso de respeto mutuo que conlleva «evitar todo aquello que sabemos que ofende a la otra parte, especialmente en lo que afecta a nuestras respectivas esferas de soberanía».

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