Los vecinos de la barriada Juan XXIII, a través de la Asociación de Vecinos Juan XXIII, han elevado un reclamo al Presidente de la Ciudad por las recurrentes promesas incumplidas que les afectan directamente. Hace casi cinco años, las instalaciones lúdicas existentes en la barriada, incluyendo una pista deportiva y un local social, fueron demolidas con la promesa de reemplazarlas por una cubierta para la pista deportiva con un local social. Sin embargo, este proyecto, que tenía un presupuesto asignado de más de 2,7 millones de euros, quedó paralizado en mayo de 2019.
A pesar de las continuas indagaciones de los vecinos, solo en febrero de 2023 se les informó oficialmente que el proyecto inicial había sido anulado y reemplazado por otro, con un presupuesto considerablemente reducido, para una pista de fútbol con césped artificial y un local social.
Con la promesa de que la obra del nuevo proyecto comenzaría en un plazo de dos meses y se completaría en cuatro, los vecinos observaron con esperanza cuando se realizaron trabajos preliminares en mayo y junio. Sin embargo, a día de hoy, la zona sigue siendo un terreno baldío.
La carta subraya el impacto de esta demora en la comunidad. Durante cinco años, los jóvenes han carecido de un espacio adecuado para actividades deportivas, los adultos no tienen donde realizar actividades culturales y sociales, y los ancianos se ven relegados a reunirse en la parada del autobús.
Al comparar su situación con otras barriadas que gozan de infraestructuras y respuestas rápidas a sus necesidades, los vecinos de Juan XXIII expresan una "envidia sana" y cuestionan por qué su barrio ha sido marginado y "castigado".
Concluyen pidiendo al Presidente que cumpla con sus compromisos y que transforme las promesas en acciones tangibles para su comunidad.
