La entrada en vigor hoy viernes del real decreto que modifica el sistema de bonificación sobre las cuotas de la Seguridad Social que han de abonar los empresarios ceutíes y melillenses ha alentado las críticas del PP. El diputado popular al Congreso, Javier Celaya, ha denunciado que las subvenciones directas con las que el Gobierno central pretende compensar las potenciales pérdidas que supondría la aplicación del nuevo modelo no cuentan con consignación presupuestaria. «Esa subvención necesita dotación económica, y eso a día de hoy todavía no existe: tal y como va la deriva de la situación política puede que conseguir la compensación sea inviable en 2024», ha argumentado el diputado en declaraciones a los periodistas.
En la línea de las tesis mantenidas por la patronal, Celaya ha censurado los efectos que, a su juicio, tendrá sobre la economía local la aplicación de la nueva norma sobre bonificaciones. El nuevo marco legal establece que el descuento del 50% vigente hasta ahora en Ceuta y Melilla deberá sustituirse por un importe fijo de 262 euros al mes, condicionado al seguimiento de acciones formativas de 20 horas al año. Estas nuevas condiciones constituyen para Celaya una «amenaza» para empresarios y trabajadores y genera «incertidumbre» sobre el futuro socioeconómico de la ciudad.
El diputado, además, sostiene que el nuevo sistema de bonificaciones pone en cuestión el denominado plus de vinculación, que comprometía a los empresarios a repercutir parte de estas ayudas en los salarios de los trabajadores. «Un trabajador temporal que sea contratado a partir de hoy realizando el mismo trabajo y la misma jornada va a cobrar menos que un compañero suyo que sí se beneficiase del sistema anterior, entre otras cosas, porque se pone en juego el plus de vinculación», ha subrayado.
Entre las debilidades que ha atribuido al nuevo modelo de bonificación, Celaya ha citado los problemas que comportará en las contrataciones plurianuales que las empresas puedan cerrar con la administración pública. El diputado ha reconocido, con todo, que `para los salarios inferior a 1.650 euros las bonificaciones se mantendrán o crecerán. «Pero para un trabajador con sueldo superior, la empresa pierde», ha precisado a continuación.
La exposición de Celaya no se compadece con la información que hoy mismo ha ofrecido la Delegación del Gobierno en un comunicado. Según el Gobierno central, el modelo que entra este viernes en vigor solo será de aplicación para las nuevas contrataciones y no recortará la cuantía de las bonificaciones percibidas por los empresarios. La nota mantiene que los más beneficiados serán los empleados con salarios más bajos.
