El establecimiento fue cerrado por orden de la Consejería de Sanidad después de que se hubieran detectado serias deficiencias, como la falta de aire acondicionado, así como problemas en determinados refrigeradores y en el estado del suelo del supermercado.
Ya se ha instalado un nuevo sistema de aire acondicionado e igualmente se ha actuado en torno a los refrigeradores que presentaban problemas. También se está trabajando en el suelo del establecimiento.
Por otra parte, ha sido retirado todo el material alimentario susceptible de hallarse en mal estado como consecuencia de la falta de refrigeración y mala temperatura ambiente.