Los dos detenidos en la operación antiterrorista desarrollada por la Guardia Civil el pasado viernes ya están en la cárcel. La juez de guardia en la Audiencia Nacional Carmen Lamela ha ordenado el ingreso en prisión de los arrestados en Ceuta y del presunto yihadista detenido ese mismo día en la localidad gerundense de Figueras. Todos ellos están acusados de la comisión de delitos de terrorismo.
La juez ha acordado para los tres detenidos prisión sin fianza.
Los ceutíes arrestados, que responde a los apelativos de “Stielike” y “Barbarroja”, fueron detenidos en el transcurso de la denominada “Operación Jabato”, desarrollada en la calle San Daniel, sita en El Príncipe, y en Villajovita. En el transcurso de los registros practicados por la Guardia Civil se intervino un subfusil con munición de calibre 9 milímetros y tres grandes machetes, armas que se hallaron ocultas en un zulo practicado en un descampado de la zona conocida como Las Caracolas.
Según Interior, los detenidos formaban parte de un grupo de extremistas en cuyas reuniones se ensalzaba la actividad de las organizaciones terroristas en diversas partes del mundo. Se da la circunstancia de que uno de los dos detenidos es sobrino de un ceutí condenado a 12 años de prisión por la Audiencia Nacional como principal dirigente de la célula yihadista que más jóvenes suicidas ha enviado a los campos de batalla de Siria desde España.
