La Universidad de Granada dispone de seis meses para obtener una descripción detallada de los turistas marroquíes que nos visitan: su procedencia, sus preferencias, los reclamos que animan sus hábitos de gasto. El objetivo de este proyecto de investigación, dirigido por el profesor Eulogio Cordón, no es otro que el de ajustar la oferta turística ceutí a los gustos y necesidades de quien emerge como la principal esperanza para la reactivación de la economía local.
El estudio de la Universidad de Granada no es el primero que se aborda para determinar el impacto que los clientes del país vecino tienen sobre la economía ceutí. Pero sí aparenta ser el primero que nace con la voluntad real de que sus conclusiones sirvan para implementar políticas efectivas que estimulen nuestra lánguida industria turística.
Informes anteriores, centrados básicamente en la relación entre consumidor marroquí y comercio local, no parecen haber servido para impulsar ninguna actuación práctica, ninguna iniciativa real dirigida a traducir en beneficio las orientaciones ofrecidas por los técnicos.
Dentro de seis meses, plazo que se han dado los investigadores para contar con resultados fiables, las autoridades y el empresariado local dispondrán de una información valiosísima que les permitirá conocer cuáles han de ser sus pasos futuros. Si los gestores están a la altura de los investigadores, todos los esfuerzos personales y materiales empeñados en esta empresa habrán valido la pena. Si no es así, habrá que grabar otra muesca en la culata de las oportunidades perdidas.
