Opinión

Candidatura popular

No puede existir duda alguna respecto a que la candidatura del Partido Popular de Ceuta  presentada en la noche de ayer  ilusiona a militantes, simpatizantes y votantes de una formación apoyada, en los tres últimos comicios autonómicos celebrados, por una gran mayoría de ceutíes,   a pesar de las dudas ideológicas despertadas por algunos y algunas de sus integrantes. Una candidatura equilibrada representativa de la sociedad ceutí, que  no solo expresa la riquísima diversidad multicultural de la ciudad, sino también la diversidad ocupacional de cada uno y cada una de los miembros de la misma.

No puede existir duda alguna respecto a que la candidatura del Partido Popular de Ceuta  presentada en la noche de ayer  ilusiona a militantes, simpatizantes y votantes de una formación apoyada, en los tres últimos comicios autonómicos celebrados, por una gran mayoría de ceutíes,   a pesar de las dudas ideológicas despertadas por algunos y algunas de sus integrantes. Una candidatura equilibrada representativa de la sociedad ceutí, que  no solo expresa la riquísima diversidad multicultural de la ciudad, sino también la diversidad ocupacional de cada uno y cada una de los miembros de la misma.

La candidatura popular, confeccionada y aprobada por los máximos órganos directivos de la formación ceutí, ha sido avalada tanto por el candidato a la presidencia de la ciudad, Juan Jesús Vivas Lara, como por la dirección nacional, al responder desde la responsabilidad a las reivindicaciones ciudadanas de regeneración. Es importante subrayar,  que la candidatura encabezada por el alcalde mejor valorado de España,  ha sido renovada en un 60%, introduciendo hasta 3 rostros nuevos en las diez primeras posiciones (4 mujeres y 6 hombres) y de ahí al número 25, otros 12.

Sin ninguna duda, una candidatura confeccionada para enfrentarse al desafió electoral más exigente de los últimos años por razones más que evidentes. No podemos obviar el desgaste electoral consecuencia directa, tanto de los años de permanencia en el gobierno de la Ciudad, como el motivado por la adopción de medidas impopulares a nivel nacional. Motivos a los que debemos añadir la competencia, por primera vez desde la llegada al Gobierno de Juan Jesús Vivas en el año 2001,  de otras formaciones políticas situadas en el mismo entorno ideológico.  En definitiva, una candidatura integradora, renovada y  representativa, que aspira a renovar la confianza de la ciudadanía.