Opinión

El batiburrillo de la economía ceutí

Parece evidente que no fluyen las ideas innovadoras y que a lo único que estamos abocados es a ser meros mercaderes de lo que otros producen. Como se está comprobando esto no crea empleo suficiente para poder absorber ese número de parados con el que cuenta actualmente la ciudad y claro está, cuando uno expone en alguno de sus artículos esta realidad, es normal quedar expuesto a la pregunta de rigor, que no es otra que la de ¿y tú que soluciones aportas?

Pues el caso es que algunas sí que hay y da la casualidad que muchas de ellas tendrían bastantes apoyos en estos momentos por parte de la Unión Europea. Dos de ellas irían en el capítulo medioambiental, caso de la reforestación de nuestros montes y del proyecto de huertos solares en los terrenos que hoy tiene en desuso el ministerio de defensa en nuestra ciudad, tareas estas en las que tendrían cabida muchos de los que hoy ocupan puesto en la lista del INEM.

Otro capítulo a tener en cuenta, sería el de la creación de una Escuela Superior de Hostelería de la que tan necesitada está la ciudad, observen si es necesaria que muchos hosteleros están demandando jefes de cocina con una titulación acorde con el conocimiento que se le exige para desempeñar unas funciones que solo saliendo de una escuela de estas características obtendrían.

Habría otros temas a tocar y no menos importantes para la ciudad, ese sería  el caso de los proyectos que desde la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ya se tienen firmados con la ciudad, muchos de ellos pendientes de ejecución y que de haberse cumplido con los plazos determinados inicialmente, estos podrían haber aportado algún tipo de solución laboral para un buen número de desempleados.

En este sentido cabe destacar el hecho de que estos aludidos proyectos están firmados desde hace ya bastante tiempo y solo quedaban a la espera de la aprobación del Consejo de Ministros. Al parecer este hecho se ha consumado en estos días, aunque eso era un mero formalismo, ahora solo queda esperar a que se pongan en funcionamiento a la mayor brevedad posible y que en su licitación se incluya alguna cláusula que, conforme a ley, exija de la preferencia en la contratación de los desempleados de esta ciudad, evitando con ello que al final siempre sean empresas de fuera las beneficiarias en las adjudicaciones y el personal contratado en su mayoría foráneo, impidiendo de igual modo que las empresas locales queden  relegadas a meras subcontratas por lo general receptoras de exiguos beneficios con los que difícilmente pueden generar empleo estable para todos esos ceutíes tan necesitado de él.