Opinión

Los empadronamientos y las estadisticas

Si echamos un vistazo a la última estadística poblacional elaborada recientemente a nivel nacional, podemos apreciar que nuestra ciudad aparece situada entre las ciudades que ganan habitantes, ascendiendo su población a los 84.263 habitantes empadronados, lo que indica que en 2015 hemos crecido en 245 habitantes con respecto a 2014.

Si lo valoramos en términos puramente estadísticos, la variación puede parecer poco significativa, pero se da el caso que en nuestra situación, estos datos vendrían a ser  engañosos, si tenemos en cuenta el descomunal fraude que en los últimos años se ha venido produciendo en el tema de los empadronamientos.

Efectivamente, si no hubiera sido por este motivo, la población local a la fecha tendría que estar muy por debajo de la cifra que hoy poseemos, no habiéndose superado en ningún caso esos más de ochenta mil habitantes que reflejan las estadísticas actuales. Queda claro por tanto, que una vez se ha puesto empeño en solucionar este problema, se ha conseguido que desde el 2012 se dieran de baja del padrón de la ciudad, más de cuatro mil empadronados que en ningún caso tenían derecho a tal consideración.

Pero, ¿a que nos ha llevado esto?, pues a algo muy sencillo y es que gracias a esta actuación, las cifras del desempleo local han bajado también considerablemente, y no porque se hayan creado nuevos puestos de trabajo, sino sencillamente porque estas personas dadas de baja en el padrón ya no aparecen en unos listados del INEM, a los que por el solo hecho de estar empadronados ya tenían acceso, y no solo a las prestaciones de este tipo, sino también a las destinadas a áreas como asuntos sociales, educación, vivienda o sanidad, situación esta que por las dimensiones del fraude, estaba ocasionado un verdadero colapso de estos servicios en la ciudad.

Al margen de lo que muchos puedan pensar nosotros solo exponemos lo que las estadísticas dicen y algunos por intereses políticos callan. De hecho hay un ejemplo muy significativo con nuestra ciudad hermana de Melilla, allí parece que aun no se han puesto las pilas en esto de los empadronamientos y por tal motivo ya aparece como la ciudad española donde más ha crecido la población, habiéndose disparado su número de habitantes en más de 4.782, quedando meridianamente claro que este repunte poblacional, no ha sido como consecuencia de un inusitado aumento de la natalidad.

Aun así, no hay que bajar la guardia en un tema tan delicado como este, pues aquellos que viven amparados en los beneficios que les supone el fraude, ponen todos sus recursos físicos y materiales en ir siempre un par de pasos por delante de las autoridades, aunque por una vez y sin que sirva de precedente debo reconocer que los actuales responsables de la Consejeria de Presidencia, Gobernación y Empleo, a la que se encuentra vinculada la oficina municipal de estadística, siguen haciendo un buen trabajo en la materia, continuando el buen camino emprendido por sus antecesores y obteniendo los resultados positivos que se pueden constatar a la fecha.