Opinión

Ramadán

RAMADÁN

Cuando la mente domina al cuerpo
este se convierte en simple sustento  de lo que habita en lo mas jondo de tus aposentos:

Tu alma,
la que a tu estructura calma
de vicios  y anhelos,
la que pone barrera al vivir sin freno.

Reflexión y misticismo
probarse  asimismo
llegar al punto de partida
vivir de modo distinto la vida.

Alba  y anochecer
son las que cuentan las horas para calmar tus pasiones,
tu debilidad, tu sed.

Poderosa  luna
que surge cuando el sol
en el  horizonte se acuna.

Más que nunca tu brillo se espera y desea
para marcar el trayecto,
de intentar ser cada día
más justo y más recto.

En definitiva,
Ramadán no es solo ayuno
sino ofrecer tu sacrificio a lo más alto de los altares
y comprobar que tu fuerza
es el tesoro que más¡¡VALE¡¡