Solidaridad, organización creada por Vox para garantizar su presencia en los centros de trabajo, ha reclamado la «dignificación» de la profesión de vigilante de seguridad, para lo que propone salarios «más justos», mayor coordinación con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y una mayor presión sobre las empresas que ejercen una competencia desleal en el sector perjudicando a las constituidas legalmente.
En un comunicado, la organización auspiciada por el partido de ultraderecha, que aspira a incrementar su presencia en los comités de las empresas del sector, reclama también la mejora del material de protección al servicio de los trabajadores y mayor amparo judicial, de manera que las agresiones a los trabajadores de seguridad privada se castiguen como las infligidas a un agente de la autoridad.
Solidaridad también reclama la prejubilación a los 60 años para los trabajadores del sector que hayan cotizado 35 años y el refuerzo de la lucha contra el intrusismo laboral. La organización también pide una mayor coordinación con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado: «Hay que mejorar la respuesta y la seguridad en diversos entornos, como el transporte público y otros servicios en los que los vigilantes son la primera línea de defensa».
La regulación de horas extraordinarias y la prevención de abusos laborales, la mejora de la formación del personal y mayor rigor en la adjudicación de los servicios de seguridad por la administración son otras de las demandas planteadas por la organización
