El Instituto de Estudios Ceutíes, promotor del ciclo de conferencias y mesas redondas sobre economía que se vienen celebrado en la biblioteca “Adolfo Suárez” desde el 25 de octubre, ha planteado una propuesta que habría de tenerse en cuenta. Los responsables de la institución han sugerido, a imitación de lo que ya se hizo en Málaga, la elaboración de un plan estratégico para propiciar el desarrollo turístico de la ciudad.
La senda indicada por el Instituto nada tiene que ver con lo que las autoridades han venido proponiendo durante los últimos años. La política turística local ha estado tradicionalmente presidida por ocurrencias, proyectos que nunca se ejecutaron e iniciativas cuya eficacia resulta cuestionable.
No basta con hacer continuas referencias a la rigidez fronteriza o a los elevados precios de los pasajes en la línea del Estrecho como problemas que dificultan cualquier intento por fundar una verdadera industria turística. Un estudio concebido para ponderar la viabilidad de un sector turístico que suponga una aportación relevante a la economía local ha de ser el resultado de un análisis serio pergeñado por especialistas, una aventura que, hasta la fecha, nadie se ha decidido a emprender.
Un análisis de la naturaleza del que aquí se propone ayudará a determinar a qué tipo de turismo puede aspirar la ciudad. Si no se acomete una iniciativa de este carácter, la duda jamás podrá despejarse.
