El ambiente de gala en el Murube, el de las grandes citas. Un estadio a rebosar, con ganas de ver al equipo conseguir la permanencia. Objetivo que se conseguía gracias al empate y al resto de resultados de la jornada.
La primera mitad deparaba poco juego, mucho respeto, pocas ocasiones y ningún gol. La Balona, en los minutos iniciales, comenzaba presionando la salida de balón y acercándose a las inmediaciones de las meta defendida por el Gato Romero, disfrutando de un saque de esquina en el minuto 3 de juego y el segundo, en el minuto 8.
El primer acercamiento de los de JJ Romero lo protagonizaba Jota, en el minuto 12. Un disparo lejano y cruzado que salía por la línea de gol. La jugada más prometedora de los blancos, la protagonizaba Reina por banda derecha pero su centro no lo alcanzaba a rematar, de cabeza, Rodri, pero no sería hasta el 43, cuando Rodri hacía lucirse a Varo, que a una mano, evitaba el tanto en una jugada a bocajarro y, sin tiempo para más, el valenciano Escriche Guzmán decretaba el final de la primera mitad.
La segunda parte repetía el guion de la primera, con el Ceuta metido en su campo y la Balona sacando un córner. Toni García en el 52 cortaba una prometedora contra, con una fea entrada por detrás a Pablo García que le costaba la amarilla. La falta, cerca del círculo central, botada por Reina, acababa en saque de portería.
Jota tenía, de nuevo, la oportunidad de romper la igualada pero su disparo se marchaba alto, un jugada que provocaba la reacción del público que se arrancaba a gritos de “sí se puede”.
El susto lo daba el Gato Romero que en su intento de sacar en corto y presionado por el delantero de la Balona se hacía un pequeño lío que despertaba los "uys" en la grada.
En el 60, Rodri volvía a rondar las inmediaciones el área de la Balona, pero de nuevo sin fortuna. Seis minutos más tarde, probaba fortuna Luismi, que acababa de ingresar al campo. Con todo por decidir, la Balona buscó la suya y Joel pero Romero hacía honor a su nombre, con una gran intervención.
El partido conseguía coger ritmo y las ocasiones se sucedían y, en el 68', el Ceuta disfrutaba de una falta al borde del área que el colegiado sólo sanción con amarilla para Connor, pero el lanzamiento de Luismi se marchaba por encima de la portería.
Perola más clara del partido nacía en la botas de Luismi que se recorría la frontal buscando el hueco y su disparo acababa rechazado para que lo cazara Julio Iglesias que sacaba un disparo que despejaba Varo.
Los nervios comenzaban a aflorar y en ese juego salía perdiendo la Balona que veía como Joel, que había entrado al campo en la segunda parte era expulsado por doble amarilla. Los mismos nervios que provocaban errores en el ataque del Ceuta
Ya en tiempo añadido, un cambio que sonaba a despedida, el de Rodri.
