El curso escolar comenzará el día 9 con la intención confesada del nuevo titular de la Dirección Provincial de Educación de apaciguar los conflictos entre la administración y la comunidad educativa que se desataron a comienzos de verano. La reforma de los bachilleratos, con la supresión de algunas de sus modalidades en los centros de la ciudad, y la conversión del instituto Almina en centro integrado de formación profesional incendiaron las relaciones entre el anterior director provincial, Cecilio Gómez, y los docentes y padres y madres de alumnos.
El nuevo responsable de la Dirección Provincial, León Bendayán, ha avanzado esta misma mañana su intención de demorar un año la conversión del Almina en centro de FP. Bendayán ha explicado que el curso que ahora comienza se dedicará a debatir con la comunidad educativa el proceso que ha de culminar con la transformación del centro. “Creemos que es positivo que se acometa la conversión, pero hay que hacerlo desde el consenso”, ha reflexionado el director provincial, quien ha garantizado, en todo caso, que quienes inicien sus estudios este año en el Almina los concluirá en el mismo centro.
En lo concerniente al futuro de los bachilleratos, el equipo directivo del Ministerio se reunirá este jueves con los directores de los centros de educación secundaria a fin de acordar la reorganización de las distintas enseñanzas ofertadas.
La comunidad educativa de declaró en pie de guerra contra la Administración el pasado junio, después de que la Dirección Provincial, sin previo aviso, anunciara la eliminación de distintas modalidades de bachillerato en cuatro de los seis institutos de la ciudad y la reconversión del Almina en centro de FP.
Ampliación de la ratio en educación infantil
Otra de las medidas adoptadas por el nuevo equipo directivo ha sido la de promover la ampliación en un 10 por ciento de la ratio entre profesor y alumno en las zonas del centro de la ciudad y El Sardinero para las enseñanzas de infantil. “Estas son zonas con mucha demanda y, quizás, con menos oferta de plazas educativas –ha explicado el director provincial- Esta medida nos permitirá bajar la presión de las listas de espera y garantizar que más alumnos queden matriculados en centros cercanos a sus casas”. Según los datos aportados por la Administración, el número de alumnos matriculados en educación infantil para el próximo curso alcanza los 3.600.
El curso que ahora comienza será también el de la implantación de la nueva Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce). La puesta en marcha de la controvertida norma se iniciará este curso en Ceuta con 19 profesores más que en el pasado ejercicio, 10 de ellos asignados a atender las necesidades del segundo curso de la formación profesional básica y el resto para las exigencias que la ley impone para 1º y 3º de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y 1º de Bachillerato.
Según datos aportados por la Dirección Provincial, el número de alumnos matriculados para el presente curso en los distintos niveles educativos se sitúa en 20.201, 256 más que el curso pasado.
