La Delegación del Gobierno mantendrá las restricciones de acceso en la frontera durante al menos los próximos diez días. Las limitaciones de entrada a Ceuta, que se instauraron la pasada semana, volvían a aplicarse durante la jornada de hoy después de que su aplicación se relajara el pasado viernes.
Las autoridades españolas siguen exigiendo la exhibición del permiso de residencia o el pase de trabajador transfronterizo para permitir la entrada en la ciudad a los marroquíes. Con todo, algunas personas empleadas en el lado español aunque sin contrato laboral han conseguido acceder a Ceuta a primeras horas de la mañana.
Los responsables de la Delegación prevén mantener el rigor de los controles hasta el día 20, fecha en la que se suspenderá el porteo con motivo de las fiestas navideñas, una medida que se mantendrá hasta después de Reyes. La intención es la de relajar las exigencias para el paso durante las celebraciones de la Navidad.
Las restricciones impuestas permiten evitar que accedan a la ciudad por Tarajal I personas cuyo propósito es retornar ya por la tarde a Marruecos portando bultos de artículos textiles, unos productos cuyo paso resulta más rentable que el de otras mercaderías. Las autoridades españolas pretenden así evitar las concentraciones e incluso avalanchas protagonizadas por porteadores que tratan de salir de la ciudad aun por la fuerza a través del paso de Tarajal, vedado al tránsito de mercancías.
