El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el primer ministro marroquí, Aziz Ajanuch, han hablado por teléfono y han coincidido en la importancia de la amistad entre los dos países. Ambos han expresado su voluntad de impulsar la agenda acordada entre ellos, que incluye la apertura de aduanas en Ceuta y Melilla, y la búsqueda de nuevas oportunidades. España, que preside el Consejo de la UE hasta fin de año, promoverá una relación más estrecha entre Marruecos y los Veintisiete.
La agenda bilateral se basa en el apoyo de Sánchez al plan de autonomía marroquí para el Sáhara, que se pactó en una reunión con Mohamed VI en abril de 2022. La Reunión de Alto Nivel (RAN) de febrero en Rabat sirvió para reafirmar el compromiso de los dos gobiernos de avanzar en esta hoja de ruta, que ha dado buenos resultados en el plano comercial y migratorio.
Sin embargo, aún quedan pendientes algunos aspectos importantes, como la reapertura de la aduana de Melilla y la creación de una nueva en Ceuta, que solo ha tenido tres expediciones de prueba. Tampoco hay avances en la delimitación de las aguas territoriales de la fachada atlántica, que interesa a Canarias. Además, está pendiente la nueva visita a Rabat de Sánchez, a la que le invitó Mohamed VI antes de la RAN.
