El Boletín Oficial de la Ciudad (BOCCE) publica este viernes los decretos por los que la empresa estatal Tragsa y su filial Tragsatec asumirán durante siete meses la concesión de servicios que hasta ahora prestaba Hércules Servicios Generales de Integración. Esta renunció a las concesiones después de más de un año de conflictos con su plantilla, en permanente movilización durante los últimos meses por el impago de sus salarios.
Los servicios de atención al público del centro cultural Estación del Ferrocarril y de los museos de El Revellín y de la Basílica Tardorromana quedarán así en manos de Tragsatec. La Consejería de Educación y Cultura también ha encargado a Tragsa el servicio de limpieza de monumentos y en El Ferrocarril.
El encargo a Tragsatec cuenta con un presupuesto de 135.770 euros. El correspondiente a Tragsa se cifra en 155.023. En ambos casos, los presupuestos tienen carácter de máximo de tal forma que la cantidad real a abonar a Tragsatec y Tragsa será la que resulte en función de los costes efectivamente asumidos por la empresa durante la ejecución del encargo.
