La asociación profesional de seguridad privada Marea Negra ha denunciado la precaria situación en la que desarrollan su trabajo los agentes que prestan servicio en el centro de acogida de menores “La Esperanza”. Marea Negra denuncia la precariedad de la plantilla y las agresiones que sufren estos trabajadores.
En un comunicado de prensa, la asociación asegura que uno de los agentes recibió varios puñetazos de un residente que le ocasionaron lesiones en la cara, además de otras heridas en un pie.
Marea Negra asegura que el centro sólo dispone de dos agentes para un número de residentes que frisa los 180. Las asociación también tiene palabras de crítica para las funciones que desarrolla el policía local adscrito al centro. “Cuando se presenta alguna problemática como la relatada, el policía no actuó de oficio, tal y como debería haber hecho en esta agresión, sino que se limitó a redactar un informe con los hechos ocurridos”, censura la nota.
La asociación profesional reclama la ampliación de la plantilla a fin de poder adscribir a tres agentes a cada turno, crear un retén de 24 horas para casos de urgencia y habilitar un espacio como zona de control de cámaras.
