La Brigada de Extranjería de la Policía Nacional ha desvelado la existencia de 183 empadronamientos falsos desde que en octubre de 2013 se pusiera en marcha la denominada “Operación Residente”. El propósito de este dispositivo es el de investigar a ciudadanos extranjeros empadronados en la ciudad pese a no residir en ella.
Las irregularidades advertidas por la Policía han sido puestas en conocimiento del Servicio Público de Empleo, tras comprobar que los empadronamientos ocultaban la intención de beneficiarse de las ayudas económicas que ofrecen las administraciones públicas.
La “Operación Residente” cuenta con la colaboración de la Policía Local.