La Sociedad Española de Ornitología, SeoBirdLife, va a solicitar al Ministerio de Defensa que identifique y evalúe el impacto de todas sus actividades en Red Natura 2000, especialmente polígonos de tiro y zonas de maniobras, y busque alternativas fuera de la red de espacios protegidos de los más impactantes.
Unos ejercicios militares de tiro son el origen del incendio que se declaró el 5 de octubre en la zona del Monte de la Tortuga, junto al campo de tiro del Renegado, que ha calcinado unas 35 hectáreas de monte del espacio de la Red Natura 2000 Calamocarro-Benzú en Ceuta declarado tanto por sus hábitats como por su avifauna.
"Este es un triste ejemplo de las repercusiones que pueden tener maniobras de las fuerzas armadas en nuestros espacios protegidos. Pero además de la posibilidad de que se produzcan incendios, estas actividades pueden provocar molestias en la fauna o una degradación de los hábitats de interés comunitario", asegura la organización pionera de la conservación de la naturaleza y la biodiversidad en España.
Para evitar estos impactos y hacer más sostenible la actividad de las Fuerzas Armadas, SeoBirdLife tiene previsto enviar una solicitud al ministro de Defensa para que identifique y evalúe el impacto de todas sus actividades en Red Natura 2000. La Directiva Europea de Hábitats y la Ley de Patrimonio Natural de la Biodiversidad exigen esta evaluación, según esta Sociedad.
Otros problemas del espacio Calamocarro-Benzú
La Sociedad Española de Ornitología asevera que "la ausencia de labores forestales en este espacio protegido favoreció una alta velocidad de propagación del incendio". José Jiménez, portavoz de SEO-Ceuta declaró en su día que "el estado de semiabandono del monte, en el que se podía encontrar hasta basura y la falta de vigilancia y prevención, ha empeorado la situación". Por este motivo reclaman una mayor gestión del espacio.
"El espacio tampoco cuenta con un plan de gestión aprobado que hubiese podido prevenir este incendio", continúa exponiendo la organización. “La administración debe aprobar cuanto antes el plan de gestión de las ZEPAs Calamocarro Benzú y la de Monte Hacho; estos planes tienen que contemplar adecuadamente tanto su posible utilización por parte del Ministerio de Defensa como la prevención de incendios”, concluye.
